Ya te perdí mujer. En el camino
me prendiste una lámpara fragante,
entonces se aromaron y se hicieron divinos
todos estos cansancios humildes y constantes.
No sé si apenas eras una leyenda o eras
un río que afluía para todo dolor
pero si fue leyenda para mi primavera
enfloreciste aromas dentro de mi canción.
Hiciste un semillero de ilusiones
que vivió ingenuamente en mi tristeza.
Lentamente. Fue el jugo de rencores
echados sobre el manto de la ilusión ingenua.
En mi torre de odios tuviste una ventana
(un vidrio ilusionado, transparente y gentil)
Ya se quebró. Es inútil que te llame mi amada
porque, mujer, en una negrura te perdí.
me prendiste una lámpara fragante,
entonces se aromaron y se hicieron divinos
todos estos cansancios humildes y constantes.
No sé si apenas eras una leyenda o eras
un río que afluía para todo dolor
pero si fue leyenda para mi primavera
enfloreciste aromas dentro de mi canción.
Hiciste un semillero de ilusiones
que vivió ingenuamente en mi tristeza.
Lentamente. Fue el jugo de rencores
echados sobre el manto de la ilusión ingenua.
En mi torre de odios tuviste una ventana
(un vidrio ilusionado, transparente y gentil)
Ya se quebró. Es inútil que te llame mi amada
porque, mujer, en una negrura te perdí.
1 comentario:
Análisis literario
En este poema el yo lírico es un hombre y expresa amor, dolor y rencor. Se enamoró ingenuamente de una mujer que lo hizo feliz, pero que en realidad no lo amaba y eso le provocó dolor y rencor.
En este poema los recursos usados son metáforas y rimas.
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